miércoles, 23 de abril de 2014

De Borges...

Diecisiete haiku

Jorge Luis Borges 

1
Algo me han dicho
la tarde y la montaña.
Ya lo he perdido.

2
La vasta noche
no es ahora otra cosa
que una fragancia.

3
¿Es o no es
el sueño que olvidé
antes del alba?

4
Callan las cuerdas.
La música sabía
lo que yo siento.

5
Hoy no me alegran
los almendros del huerto.
Son tu recuerdo.

6
Oscuramente
libros, láminas, llaves
siguen mi suerte.

7
Desde aquel día
no he movido las piezas
en el tablero.

8
En el desierto
acontece la aurora.
Alguien lo sabe.

9
La ociosa espada
sueña con sus batallas.
Otro es mi sueño.

10
El hombre ha muerto.
La barba no lo sabe.
Crecen las uñas.

11
Ésta es la mano
que alguna vez tocaba
tu cabellera.

12
Bajo el alero
el espejo no copia
más que la luna.

13
Bajo la luna
la sombra que se alarga
es una sola.

14
¿Es un imperio
esa luz que se apaga
o una luciérnaga?

15
La luna nueva
ella también la mira
desde otro puerto.

16
Lejos un trino.
El ruiseñor no sabe
que te consuela.

17
La vieja mano
sigue trazando versos
para el olvido.

La cifra, 1ra ed. Buenos Aires, Emecé, 1981.
1ra ed. Madrid, Alianza Editorial, 1981. Col. Alianza Tres, 159. 

Poesía... ¿qué?

Poesía... ¿qué?

Llaman por ahí poesía "experimental" a una forma de hacer poesía que vincula la palabra y la forma, el sonido, la textura, los objetos... Debo decir que tal vez concuerde con lo de "experimental", pero solo si entendemos que tiene más que ver con sentir la experiencia que con hacer una experiencia como si fuera un experimento científico.

Les comparto unos enlaces para que visiten; se pueden sorprender gratamente:

Ubu Web

Arte Correo para el Mundo

Vortice Argentina

Márcio-André - Poesia sonora, visual e experimental

Son solo unos ejemplos.

Para el cierre, un caligrama de G. Apollinaire:

jueves, 17 de abril de 2014

Gabo: gracias por tanto.

12 Consejos de Gabriel García Márquez para escritores

 

1.  Una cosa es una historia larga, y otra, una historia alargada.
2. Un escritor puede escribir lo que le de la gana siempre que sea capaz de hacerlo creer.
3. No creo en el mito romántico de que el escritor debe pasar hambre, debe estar jodido, para producir. 
4. Es más fácil atrapar un conejo que un lector.
5. El final de un reportaje hay que escribirlo cuando vas por la mitad.
6. Hay que empezar con la voluntad de que aquello que escribimos va a ser lo mejor que se ha escrito nunca, porque luego siempre queda algo de esa voluntad.
7. Cuando uno se aburre escribiendo el lector se aburre leyendo.
8. No debemos obligar al lector a leer una frase de nuevo.
9. El autor recuerda más cómo termina un artículo que cómo empieza.
10. Se escribe mejor habiendo comido bien y con una máquina eléctrica.
11. El deber revolucionario de un escritor es escribir bien.
12. Durante mucho tiempo me aterró la página en blanco. La veía y vomitaba. Pero un día leí lo mejor que se escribió sobre ese síndrome. Su autor fue Hemingway. Dice que hay que empezar, y escribir, y escribir, hasta que de pronto uno siente que las cosas salen solas, como si alguien te las dictara al oído, o como si el que las escribe fuera otro. Tiene razón: es un momento sublime.

Fuente

lunes, 14 de abril de 2014

A 30 años, Julio Cortázar

 

Terapias


    Un cronopio se recibe de médico y abre un consultorio en la calle Santiago del Estero. En seguida viene un enfermo y le cuenta cómo hay cosas que le duelen y cómo de noche no duerme y de día no come.
-Compre un gran ramo de rosas- dice el cronopio.

    El enfermo se retira sorprendido, pero compra el ramo y se cura instantáneamente. Lleno de gratitud acude al cronopio, y además de pagarle le obsequia, fino testimonio, un hermoso ramo de rosas. Apenas se ha ido el cronopio cae enfermo, le duele por todos lados, de noche no duerme y de día no come. 

 Julio Cortázar (1914-1984), a 30 años